jueves, agosto 11, 2005

SOLEDAD

Si uno se fija bien, uno de los temas principales en El Señor de los Anillos es la soledad. Unas veces la soloedad que subyace pese a que estamos acompañados, la soledad del alma que sabe que nadie sabe lo que siente de verdad. La soledad valiente de quien renuncia a la compañía por una razón de fuerza mayor, por extrema generosidad para aquellos a quien ama y pone en peligro su vida por ellos. La soledad de quien cree que jamás encontrará lo que busca, la del miedo a la soledad.

Pero quizá donde la construcción del Profesor es más brillante es en la soledad de Gollum. La soledad que se cree elegida pero, en el fondo, ha sido la más cruel de las imposiciones. La que se produce como "recompensa" a la ambición sin etica. La del que ha perdido todo y es escavo de una ambición más fuerte que ningún otro aspecto en su vida, del que se abandona en la oscuridad más profunda para ni siquiera tenerse a sí mismo de compañía, olvidado incluso por su propia memoria. Pero es la soledad más desesperada, la más devastadora, porque si siquiera su olvido le libra de recordar y ser consciente de que, en otro lugar y otro tiempo, él fue una persona completa, y la consciencia de que jamás lo volverá a ser, porque cuando se le presenta la oportunidad, su obsesión le roba esa última esperanza.

Por eso no es posible odiar a Gollum. ¿Cómo no sentir tristeza y compasión por alguien con un fin tan miserable y solitario? Un fin que podría llegar a ser el nuestro con sólo dar un mal paso.

Leer El Señor de los Anillos es profundizar en las diferentes facetas del ser humano. Supongo que esa es una de las razones por las que siento la necesidad de leerlo una y otra vez.

Zirbêth.