CAUSAS NOBLES, MEDIOS VILES

Vale, va a ser cortito y lleno de lugares comunes y frases dignas de Sancho Panza (o Samsagaz Gamgi).

Hay muchas cosas que podemos hacer para mejorar el mundo en que vivimos. Desde reciclar, usar el transporte público, recoger las cacas de nuestro perro cuando lo sacamos, hasta adoptar niños huérfanos, hacer trabajos sociales, largarnos con una ONG al otro lado del mundo a llevar educación, sanidad, lo que sea. No todos tenemos la misma capacidad, ni las mismas ganas, ni las mismas oportunidades.

Dentro de esa lista de cosas, una de las que personalmente más valoro es enseñar a pensar por uno mismo y ayudar a desarrollar el sentido crítico y a cojerle el gustillo a usarlo con fines constructivos. Para lograrlo, hay que ser muy respetuoso con la persona a la que tratas de educar en ello. No puedes tratar de enseñar a alguien las ventajas del respeto al medio ambiente a base de gritos, de imposiciones, ni de brocas. Dando un salto de gigante, no se puede tratar de mejorar las condiciones de vida de un país arrasándolo a bombas. Quien usa la violencia de otros como excusa para ejercerla él mismo, está actuando como un bastardo.

Cada cultura tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. Y van evolucionando, más o menos deprisa. Si apareciesen ahora unos extraterrestres y tratasen de eliminar a la raza humana porque son perjudiciales para la salud del planeta, nos parecería una mostruosidad. Bombardear un país con la excusa de que se hace para liberrarle de un régimen fascista, lo es igualmente.

Como las culturas, las personas individuales tienen ritmos diferentes de maduración. Incluyo en eso de madurar lo de ir aprendiendo y siendo conscientes cada vez más de como funciona nuestra sociedad y que fallos tiene, de como pueden ayudar o colaborar para que mejorar el lugar en el que viven, empezando por el barrio y acabando por el planeta. Se puede estimular de manera constructiva esa maduración, pero lograr el noble fin de la madurez no justifica que se utilice la violencia. Esa madurez será siempre incompleta si para llegar a ella ha habido que usar la violencia. Y quien cree estar mejorando a una persona a base de insultarla, dengrarla, etc, está él mismo demostrando una enorme inmadurez.

Así, lo que podría ser un gesto constructivo, se convierte en un acto más de violencia. En darle carburante al cangrejo ese que va para atrás en vez de para adelante.

EEUU ejerció (y sigue ejerciendo) la violencia en Irak, y el Gobierno español de entonces le ayudó a ejercer esa violencia (un tanque sin galosina no avanza sobre una cuidad, un avión sin gasolina no vuela y alcanza objetivos con sus bombas), y esa violencia dio excusa, razón, motivo, como se quiera llamar, a otros para ejercer la violencia en la ciudad de Madrid. Esa misma violencia, un año más tarde, hace que alguien use la violencia verbal para... ¿para? Desde el momento en que el medio es la violencia (en el grado que sea y la ejerza quien la ejerza), el fin pierde su valor. Se desvirtúa, por noble que pueda parecernos.

Por eso, la guerra nunca será el medio para alcanzar la paz.

La violencia, sólo engendra violencia.

El fin, no justifica los medios.

Zirbêth.