viernes, abril 06, 2007

DESGANA

De paseo por la blogosfera, encuentro bitácoras que me recuerdan, de algún modo, a la mía en sus primeros tiempos. Esos tiempos en que se me ocurría hablar de todo, que hacía un post de cualquier pequeña anéncdota, de mis pensamientos, de mis lecturas.

Pero llevo ya un tiempo de soledad autoinducida en que parece que no sólo me cueste ver a mis amigos reales, sino que tampoco encuentro razones para escribir sobre el día a día, sobre lo que se me pasa por la cabeza, sobre eso que vi cuando fui a comprar y que me enterneció o disgustó, o vaya usted a saber. Tampoco siento ese impulso de reflexionar en palabras escritas, de compartir mis anhelos y preocupaciones, vitales o globales. Y lo poco que escribo parece más un parte médico que los deseables posts para un blog.

Me falta algo, y no sé qué es. Y me sobra desgana. En mis pulsos creativos, parece que paso de una vorágine creativa al más desolado páramo del dejarlo estar. No quiero obsesionarme. Sé que, en unos días volveré a escribir, sobre Herussa, sobre Marta y sobre lo que me venga a la cabeza. Pero ahora mismo tengo la sensación de que, cualquier cosa que escriba, ya la habré escrito antes mejor. Temo que ya no haya más introspección porque se haya acabado aquello sobre lo que indagar. Espero salir, de una vez por todas, de esto que me pasa y que me tiene así, desganada de casi todo.

Zirbêth.