lunes, febrero 14, 2005

CAOS

Caramba, esta mañana he releído lo que escribí anoche y...

Pasé el día en Aranjuez, como tenía previsto. Comilona, paseo y, de repente, una sensación de agotamiento que me hizo querer salir corriendo a casa lo antes posible. Me dormí en el tren tan profundamente, que una señpra me tuvo que despertar, tocándome, al llegar a Atocha. Atontolinada, me equivoqué de sentido en el metro, y acabé a diecisiete paradas de mi casa, en la otra punta de Madrid. Llegué aún más cansada, con sensación febril, y me puse a escribir.

Es cierto, es un tanto caótico lo que escribí, y al repasarlo por la mañana me encontré, no ya con las habituales faltas de ortografía, si no con un sin número de errores de teclado (dislexia dáctil, me gusta llamarla), palabras mal escritas por torpeza, frases a medio borrar que se enlazaban con la nueva idea que había continuado adelante, dejando al final más sensación de confusión, si cabía.

Debería cojer los cuatro temas principales y escribir sobre ellos. Da la sensación de que estaba medio dormida. Bueno, en realidad, me he levantado con fiebre. De esa de agotamiento. Estoy por acostarme otra vez, aunque sea mientras estudio. Pero me dormiré, ya verás.

Zirbêth.