viernes, julio 02, 2004

REVANCHAS TE DA LA VIDA

Entro el otro día en una tienda de ordenadores que hay cerca de casa (una tienda de esas de gente supermaja que sin pedirte que pagues un megaseguro cuando les compras un ordenador, te ayudan con el hardware, el software, te lo arreglan rapidito, te lo instalan si es necesario, en fin, un buen servicio) y me pongo a hablar con un chico sobre Linux y demás, cuando me fijo en que su mirada se desvía constantemente hacia un lado, así que me giro y veo, para mi sorpresa, al mismo tipo que ha estado robando en la tienda de ordenadores en la que yo trabajaba.

-Hombre, hola, ¿cómo estás? ¿Sabes que por tu culpa me han despedido del trabajo?

El tipo se hace el loco, mientras el dependiente de la tienda saca de la bolsa las tres cajas de diferentes productos que se había agenciado sin pagar, y me dice:

-¿Te han despedido?- a lo cual añade inmediatamente, pero demasiado tarde porque ya se le ha notado que me había reconocido perfectamente -¿De dónde? ¿Por qué?
-De la tienda de ordenadores en la que has estado robando durante semanas; porque decían que la que robaba era yo.
-¿Ah sí?
-Sí, muchas gracias. Vete y no vuelvas más por aquí.

El dependiente, mirándome alucinado, me da las gracias por detener al tipo que le estaba robando la friolera de dos procesadores y un programa de copia de DVD. Le dije que, si quería, podía contar conmigo para testificar contra él si decidía denunciarlo.

A veces, la vida te compensa por los malos ratos que te da.

Zirbêth