sábado, mayo 17, 2008

AMOR

Leyendo blogs ajenos, encuentro cosas que no dejan de sorprenderme. A estas alturas no debería ser una de ellas lo diferente que es el amor para cada persona. ¿Cómo puede ser que alguien que ves con pareja, que te habla de su felicidad, que parece una pareja estable, se rompa, y al poco tiempo ya esté esa misma persona hablándote de una nueva pareja? No me cabe en la cabeza, de verdad que no. No sé si, además, siento un poco de envidia.

Una vez, C. me dijo que no sabía estar solo. Que quería mucho a su novia, pero que era incapaz de pasarse sin su pareja, sin una pareja, más de una semana. Me quedé a cuadros. Primero, porque a mí me pasa todo lo contrario, que no puedo estar sin mí pareja, pero puedo estar perfectamente sin pareja (es más, me cuesta estar en pareja). Segundo, porque a esas alturas de la película ya debería haberme dado cuenta.

Amor es para mí un sentimiento muy profundo, a la vez que muy difícil de sentir. Curiosamente, cuando aparece es clarísimo. No salgo con alguien si no tengo claro que le quiero. Sin embargo, mucha gente empieza a salir cuando tan sólo se gustan ligeramenmte, y luego construyen el amor sobre eso. De verdad, me da envidia. Lo más parecido a un amor de lento crecimiento que he sentido alguna vez, se concretó en semanas. Preferiría una amplia gama de grises, en este campo.

Bueno, da igual. Supongo que mi próximo amor anda por ahí. A ver si coincidimos. Mientras, disfrutaré de mi soledad. Porque puede que, el próximo amor se quede y ya no vuelva a estar sola nunca más. ¡Qué vértigo!

Zirbêth.