viernes, diciembre 30, 2005

HACE UN AÑO...

Si hace un año, por estas fechas, estaba a puntito de volver de Valinor a Númenor y mi estado emocional era lastimoso, triste y de completo desamor, ahora las cosas han cambiado considerablemente. Ya no tengo el corazón roto, como hace un año casi lo tenía (estaba en proceso de resquebrajamiento), ni tampoco estoy en plan gallina clueca, por más que no pare de poner fotos de los bebés de mis amigos.

No. Ahora mismo estoy bien, a pesar de las crisis de ansiedad y de la montaña rusa emocional que mi maravilloso cerebro me proporciona. Pero no estoy triste todo el tiempo. No echo de menos al amor perdido (es lo que tiene desenamorarse por fraude, que se te quita la tontería de golpe). No echo de menos, en general, el amor: sólo en determinados momentos puedo pensar en que jo, mira que bien están Fulanito y Menganita, yo quiero eso. Pero, hoy por hoy, vuelvo a estar como hace unos años: felizmente sola, sin ganas de pareja, ni remotamente. El otro día iba por los jardines de Aranjuez con mi madre, y cuando me cruzaba con parejitas felices no sentía envidia sana, ni deseos de amor: sentía alivio, puro y duro alivio. Estoy, se ve, pasando otra de esas etapas de soledad disfrutada.

Y sobre los bebés. Fijáos, eso sí me puede apetecer más. Es decir, mientras que tener pareja no me motiva nada, el ser madre sigue estando en mi agenda de deseos para el futuro. Pero tampoco para un futuro demasiado inmediato. Eso sí, disfruto muchísimo viendo los bebés e hijos de mis amigas y amigos.

Decididamente, necesito una temporada de soledad, de disfrutar de mis amigos, de centrarme en mi futuro profesional y de, no sé, ¿coser vestidos maravillosos? O algo así. Es que pienso en que tengo pareja y el tiempo que me ocuparía, y se me ponen los pelos como escarpias.

Así que, bueno, espero que los Reyes Magos le concedan a Chica con falda roja lo que ha pedido y me traigan esa isla desierta que ponía en su carta. Desierta, pero bien comunicada, ¿eh? Que me encanta recibir amigos y hacer fiestas, como la de mañana...

Zirbêth, away.