viernes, junio 10, 2005

¡LAS ENCONTRÉ!

Menos mal, ya pensaba que me había quedado sin ellas. Estaban en el coche de T., quese ve que la otra noche, como iba tan cansada y medio dormida, se me calleron y no me di cuenta. Que susto más grande, jo.

¡Veooooo!

Zirbêth, y sus gafas.