domingo, abril 27, 2008

AMADA GATA MALVADA

El otro día, S. me decía que estaba enamorada de mi gata. Es obvio que tiene razón. De otro modo no soportaría que me tenga llena de arañazos, que me mordiese el otro día la boca porque "ella quería queso cheddar", que esta mañana metiese su ociquito en mi vaso de leche y se bebiese parte de mi colacao, que me persiga cada vez que me ve descalza o en chanclas para moderme los dedos de los pies, que me despierte de madrugada para jugar, que me cace todo lo que tengo en el escritorio, me mangue las pastillas, me robe las pinzas del pelo...

¡Dioses, como quiero a esa bola de pelo!

Zirbêth, in love.

¡¡¡UUAAAAAHHHAAAHAAAA!!

Ya está aquí el calor. Noooooooooo.

La paga extra va a ir a un aparato de aire acondicionado portatil. Que los ecologistas me perdonen, pero necesito poder dormir y en mi dormitorio da el sol toda la tarde.

Zirbêth, con la ropa de verano en Aranjuez.

sábado, abril 26, 2008

LA PRIMERA SEMANA DE COLE

No me gusta el fútbol, ya lo sabéis, pero con el cambio de curro me siento como si hubiese pasado de tercera regional a segunda nacional (¿se dice así?). Esta empresa es una gran oportunidad para mí, y no debo dejarla pasar. Con la misma pasión que en el pasado me entregué a causas como una mereth o una relación de pareja, así es como estoy tomándome esta oportunidad. Es como si me enamorase, pero sin tantos riesgos. Eso sí, no pierdo de vista el hecho de que es una oportunidad, no "la" oportunidad.

La oficina está en pleno barrio de Salamanca. Me di cuenta el miércoles de que, para ser exactos, está casi exactamente paralela a la consulta de aquel que fue el gran amor de mi vida. La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida... Los aspectos negativos son que no tenemos acceso desde nuestros ordenadores a Internet, y que la zona es muy cara y no hay restaurantes económicos como los de mi ex-curro. Por cierto, hablando de mi ex-curro: se ha largado otra compañera, harta de cosas muy parecidas a las que me pasaron a mí. ¿Habrá desbandada? Yo estoy contentísima de haber tomado la decisión de irme de allí. La frase "más vale malo conocido que bueno por conocer" no va conmigo.

Aún es pronto para hablar de mis compis. Son gente entre los veinticinco y los cuarenta, aunque la mayoría no llega ni a los treinta y cinco. En contabilidad, mi departamento, estamos agrupados de tres en tres, más o menos: contable senior, contable junior y auxiliar. De momento, yo estoy ayudando a todo el que me lo pide. Esta semana han acometido un cambio de sistema operativo, lo que sumado a que no pude acceder hasta el jueves a mi ordenador, han resultado en que me he pasado la semana ordenando archivos, primero en contabilidad y luego en legal. En legal son dos chicos y una chica, y ahora mismo me adoran, porque les estoy dejando los archivos más ordenados de lo que jamás han tenido. El otro día, cuando estuvimos cosa de una hora y media sin ordenadores, se dedicaron a jugar al fútbol con una bola de papel, ha hacer avioncitos y lanzarlos por la ventana, etc. Aunque hay una compañera que lo está pasando muy mal, porque se le ha muerto un familiar de una de esas muertes lentas que tanto desgastan a todo el mundo.

En fin, que por ahora bien. A ver si "pongo el huevo" y echo raíces un tiempo. Por cierto, mi jefe directo es Peter Griffin. Lo juro.

Zirbêth.

lunes, abril 21, 2008

EL PRIMER DÍA DE COLE

El primer día de cole ha estado bien. Pero después de contarlo tres veces por teléfono y dos en persona, se me han quitado todas las ganas de escribir sobre ello.

Zirbêth, vaga autoproclamada.

sábado, abril 19, 2008

BUENAS INTENCIONES

Anoche, como muchas otras (mayoría) me acosté (tardísimo) pensando aquello de "mañana me pongo sin falta" (con varias cosas). Pero claro, llega la mañana y, aunque mi mami me ha despertado a las diez y media, una buena hora para un sábado, son las dos y no he empezado ninguna de esas cosas que tenía en mente.

Primero he fregado platos y polletes, he desayunado viendo los periódicos por encima y he revisado el correo. Me he puesto a ordenar el cuarto y tal con la segunda llamada de la mañana. He barrido, ordenado, he limpiado la arena de los gatos, les he puesto de comer, le he achuchado, y tercera llamada de la mañana. Cuando aún no habíamos colgado, otra amiga por el msn me ha enganchado (hacía mucho que no hablábamos).

Total, no es que no haya hecho nada (que hasta he limpiado un mubele de la cocina), pero son las dos de la tarde y de lo que debería haber hecho, esas medias promesas nocturnas, nada de nada. Confieso que no me apetece, que estoy demasiado inquieta por lo del curro, cansada emocionalmente por lo del ex-curro.

Esta tarde he quedado con mi primilla para conocer a su novio. Así, a lo tonto a lo tonto, he echado el día. Y es que las amistades se comen buena parte del tiempo, incluso de alguien como yo, que se puede decir que paso bastante de todo por solitaria y vaga.

Zirbêth, bostezando.

EXTRAÑEZA

Me siento extraña. Soy animal de costumbres y q8ue me cambién las costumbres me aturde. No todas las costumbres, claro. Sólo las que me dan de comer. Necesito empezar ya en el nuevo curro, hacerme a él, conseguir cierta sensación de estabilidad y rutina. Ahora mismo me siento desorientada y como caminando haciendo equilibrios sobre un bordillo demasiado alto.

Además: no hay nada peor que tener demasiado tiempo libre cuando tienes que hacer muchas cosas que dependen de la fuerza de voluntad. Acabas no haciendo nada. Es como levantarte con mucho tiempo para ir al curro: te confías y acabas llegando tarde.

Zirbêth.

martes, abril 15, 2008

UN PASO AL FRENTE

¡Qué den un paso al frente los que se hayan ido ya del curro en que los puteaban!

¡Qué den un paso al frente los que ya hayan cobrado el finiquito!

¡Qué den un paso al frente los que se hayan despedido, no sin cierta tristeza, de sus compis de curro!

¡Qué den un paso al frente los que tengan esta semana por delante para desestresarse, presentar la declaración de la renta, renovar el DNI o lo que sea que tengan pendiente!

¡Qué den un paso al frente los que el lunes que viene empiecen en un nuevo curro... ganando 4000 € más al año!


Zirbêth, cinco pasos al frente.

domingo, abril 13, 2008

CITA Y REFLEXIÓN: DUNE

"Más allá de un punto crítico, los grados de libertad, en un espacio finito, disminuyen a medida que se incrementa el número. Esto resulta válido tanto para los hombres en el espacio finito de un ecosistema planetario como para las moléculas de gas en una redoma sellada. La cuestión para los seres humanos no es saber cuantos de ellos podrán sobrevivir dentro del sistema, sino qué tipo de existencia será posible para aquellos que sobrevivirán."
Frank Herbert, Dune.


El otro día, Anónimo Indiscreto me dejaba un comentario en el que mantenía que creía que el tema central de Dune era "el hombre hecho Dios". Sin embargo, debo decir que disiento, y que la sobrehumanidad de Paul Atreides-Muad'Dib es sólo un recurso para hablar de la gran confrontación interior a la que la humanidad se enfrenta desde el principio de sus tiempos: ambición contra supervivencia.

El gran desafío de la humanidad como grupo siempre me ha parecido que es alcanzar un equilibrio. Por un lado, como expone la novela, si el ser humano se apoltrona en una comodidad más o menos paradisiaca, se estacanca, deja de mejorar, y entonces se vuelva acrítico y vulnerable, no sólo ante posibles amenazas externas, sino sobre todo a sus propios vicios y debilidades. Por otro lado, cuando las condiciones en que vive son realmente adversas, imposibles para la vida, es cuando el ser humano se supera a sí mismo, alcanzando sus mayores logros y avances, pero también padeciendo los mayores sufrimientos y devastación.

La ambición que durante los malos tiempos busca una vida mejor, en los buenos tiempos se transforma con facilidad en avaricia incontenible. Si hay un nivel de vida que pueda considerarse como bueno, desgraciadamente rara vez se considera suficiente. Así, se desperfila y pierde de vista lo que es vivir mal, y los valores se disipan, perdidos en la ambición que ya perdió su objetivo.

A la hora de poner en la balanza eso que llamamos vivir bien, lo superfluo va ganando espacio en el platillo a lo necesario, y acabamos dirigiendo nuestro esfuerzo a justo aquello que en realidad no es beneficioso para nosotros. Eso que poco a poco nos arrastrará a vivir de nuevo peor, sino devolvernos de nuevo al arroyo de la precariedad y la verdadera mala vida.

El ser humano, que se sabe finito y pasajero, elige los placeres finitos y pasajeros. Se ve siempre como individuo antes que como miembro de una especie. Tiene mala memoria y, por tanto, poca capacidad crítica. Y sigue esperando que un día llegue alguien que se responsabilice de todo por él, que todo lo arregle, que le diga qué tiene que hacer. Entonces, automáticamente, convierte en Dios esa esperanza, ese deseo, dejando en unas únicas e inexistentes manos lo que le corresponde hacer como toda una especie.

Creo que si apareciese ese dios, el conjunto de la humanidad se sublevaría. O, al menos, esa parte que siempre tuvo claro que quiere el poder para sí, y que sabe que el resto de la humanidad es a la vez la fuente y la herramienta para tenerlo.

¿Cuánto tiempo más seguira la humanidad sumida en esta especie de adolescencia estúpidamente irresponsable y egoista?

Zirbêth.

sábado, abril 12, 2008

PUES NO HA SIDO TAN DIFÍCIL

Lo admito: los gatos me gustan más que el sexo.

¡Pues no ha sido tan difícil!

Zirbêth, adoradora de esos seres superiores llamados gatos.

PUF, POR FIN SE ACABÓ LA SESIÓN DE FOTOS

QUIETECITA... ¡YA!

NI SIQUIERA RESPIRES, ¡POR FIN SE HA DORMIDO!

UN MONTÓN DE COSAS

Hay un montón de cosas que echo de menos de Inglaterra. Algunas, como la lluvia, los olores, personas concretas, son imposibles de recuperar a menos que me vuelva allí. Otras, sin embargo, no. O, al menos, no debería ser así.

Las tiendas Prymark, por ejemplo. Tiendas en las que te puedes vestir por poquísimo dinero. Ya han pasado tres años, pero que alguien me diga de alguna tienda en España donde por siete euros con cincuenta te puedas comprar un conjunto de ropa interior mono, un pijama gustoso y cómodo por nueve euros, o un jersey precioso y suave por seis euros, sin que sean unas mierdas que no te duren ni dos puestas. Sin que sean de los chinos, huelan a plástico y no te los puedas poner porque te salga un zarpullido al poco de hacer contacto con la piel. Ropa donde siempre encuentras talla, por cierto.

Las librerías de segunda mano. Entrar en una habitación llena de libros hasta los topes, y salir con tres libros debajo del brazo por un euro y medio. Son geniales esas librerías, algunas primorosamente ordenadas, limpias, clasificadas. Otras verdaderos cajones desastre, con montañas de libros por los rincones que aún no se han podido clasificar. Casi prefiero estas últimas, donde encontrar libros se convierte en una peculiar y polvorienta búsqueda del tesoro, tirado por los suelos durante horas, bajo la atenta y curiosa mirada de un excéntrico librero tan polvoriento como sus libros. Más de una vez uno de esos libreros me regaló un libro por el simple hecho de haberme visto medio tumbada en su sótano destartalado, concentrada pese a la tos y el lagrimeo por el polvo, con cara de niña maravillada. Creo que eso es algo que jamás encontraré en España.

Las tiendas de miscelánea usada. Lugares para perderse e imaginar vidas pasadas, ajenas, intuídas en cortinas de terciopelo de largos imposibles, sombreros de copa o bombines con la sombra del desgaste de antiguas cabezas, libros con dedicatorias, palabras muchas veces incomprensibles, olvidadas fotos entre sus páginas. Puedes encontrar desde una videoconsola penúltimo modelo hasta zapatos primorosos que bien pudieron haber pisado la cubierta de algún olvidado Titanic. Vestidos, juguetes, gafas, vajillas, figuritas, libros, fotos, instrumentos musicales. No importa que no puedas comprar nada: es un viaje en el tiempo al alcance de cualquier mano, cualquier día, paseando al salir del trabajo.

Echo de menos que si algo que compras no funciona bien o se rompe, te lo cambian automáticamente por uno nuevo o te devuelven tu dinero, en vez de las eternas reparaciones que no son sino malos parches que tenemos aquí. Hecho de menos las tiendas de segunda mano donde puedes encontrar casi de todo, pero principalmente que ayudan a mucha gente con pocos medios a montar su hogar con sofás, lavadoras, camas. Si estás en paro, te llevan las cosas gratis a tu casa. Echo de menos los mecanismos de compensación que ayudan a las madres solteras, a quien no llega a fin de mes, con ayudas reales y dinámicas, rápidas, desde dinero para pagar el alquiler hasta cosas como sueldos mayores para las madres que se animen a trabajar fuera del hogar: no sólo porque así pueden ganar en menos horas lo que necesitan para vivir, sino porque a las madres se las aprecia como mejores trabajadoras, más formales y responsables, capaces de puestos de supervisión y mando porque, si llevan un hogar, también pueden llevar una oficina.

Echo de menos que la ropa y el calzado de los niños no lleven IVA. Echo de menos la leche fresca de verdad, que se te estropéa si la dejas fuera de la nevera y no dura más de dos o tres días dentro de ella. Echo de menos los calefactores de agua que están en la propia ducha, independientes del resto de la casa, que evitan que te hieles porque alguien abre otro grifo. Echo de menos la gente sin prejuicios por tu aspecto o peso, que te valora por quien eres y no por tu belleza. Echo de menos...

Zirbêth, nostálgica.

viernes, abril 11, 2008

PARQUE DE ATRACCIONES

Drunna ya es el doble de gato (al peso) que cuando llegó a casa. También, es ya una niña y no un bebé. Una niña hiperactiva y traviesa, de esas que en las pelis americanas, cuando vas a darle un beso, te dicen aquello de "mamáaaaaaaaa", con cara de fastidio. Una niña siempre llena de churretes, que lo muerde todo, que hace de todo un juguete y sobre todo de su humana (servidora). El gesto más cariñoso por su parte, antes de irse a dormir (sobre mi almohada, por encima de mi cabeza), son unos ronroneos rápidos mientras me muerde la nariz y los mofletes, suavemente y con lametones intercalados.

Gato la adora. La busca para jugar, pero también para lavarla y regañarle cuando se sube a sitios raros. A veces creo que se pasa de efusivo en los juegos, pero lo cierto es que ella también. Además, si le hiciese daño de verdad, ella no le buscaría para seguir jugando. A ratos duermen juntos, pero Drunna lleva ya días que quiere dormir solita, ni con gato ni conmigo (salvo por las noches, y creo que es más bien porque le encanta la almohada de viscolastic que por estar conmigo...).

Pero, aunque juegan por toda la casa, sin duda mi dormitorio es su lugar predilecto. Pasan aquí la mayor parte del día, saltando encima de mi cama, del baul (que ya han destrozado), de las mesas, de mí... No puedo andar descalza o con chanclas, porque le ha dado por morderme los pies, puñetera. Así que si habláis por teléfono conmigo y una de cada cuatro palabras es un ay, ya sabéis qué está pasando.

Uno de sus pasatiempos favoritos es subirse al tablero del teclado del ordenador para morderme los dedos cuando tecleo o cuando uso el ratón. Me cambia la configuración del teclado, de las ventanas del explorador, me han matado varias veces por su culpa en el WoW...

Come hasta reventar, su comida y la de Gato, que se va compungido y solemne cuando ella asalta su plato, para volver al rato a ver si hay suerte y ella se ha dejado algo de comida de bebé. Pero rara vez tiene suerte, porque Drunna come al día su peso o más. Es una barriga con patas. Patas y dientes.

Es, sin duda, un animal feliz. Y Gato también.

Zirbêth.

martes, abril 08, 2008

DICHOSO MURPHY

Todo el mundo sabe que un baño caliente es un medio estupendo de calmar los nervios y librarse del cansancio tras un día de trabajo estresante. Si, además, en el trabajo te putean y tal, una ducha calentita al llegar se lleva por el sumidero la primera capa de malos ratos y ese sudor especial identidicado con el miedo.

Pues bien, el pasado veintisiete de marzo hubo una revisión rutinaria del gas y descubrieron que nuestro calefactor de agua estaba mal y nos lo cortaron. Que viniesen a ver el aparato a ver si tenía arreglo llevó una semana y un día. El viernes pasado, por fin, nos dijeron que el calefactor está viejo y cascao como para que arreglarlo no merezca la pena, porque ni con piezas nuevas nos garantizan que vaya a funcionar bien. Eso, nos lo dijeron el iernes a las seis y media de la tarde, cuando ya estaban cerrados hasta el siguiente lunes los proveedores de servicios de este tipo. Ayer lunes, por fin, nos hicieron un presupuesto, que la dueña del piso ha aprobado a descontar del alquiler el mes que viene. Más de mil eurazos de calefactor estanco. Eso sí, hasta el jueves o el viernes no les llega el modelo que necesitamos, así que me veo toda la semana a base de duchas heladas y yendo a Aranjuez a casa de mi madre cuando me quiera lavar el pelo decentemente.

A mí me gustaría poder ir más mona que nunca al curro estos días que me están dando por saco, pero no hay manera. Y más aún necesitaría poder ir recién duchadita y monísima de la muerte a entrevistas de trabajo que me permitan largarme de esta empresa lo antes posible.

Zirbêth, con unos enanos de dos metros.

lunes, abril 07, 2008

DUNE

Estoy leyendo Dune, uno de esos libros de ciencia ficción (más bien me parece política ficción) clásicos que tenía pendientes. Lamentablemente, como ocurre demasiadas veces cuando se trata de un "clásico", aunque me lo estoy pasando bien leyéndolo, la verdad es que hay un par de cosas que no me están gustando:

1. Que el medio para hacer ver lo inteligente y poderoso que es Paul Atreides (y otros personajes), es un recurso muy pobre: que los demás personajes hablen maravillas de él. Supongo que ningún autor debería crear un personaje más inteligente que él mismo. No debería decirnos lo inteligente y superior que es Paul Atreides, deberíamos verlo.

2. No para el autor de decir en boca de sus personajes que los inicios son difíciles. Olvida decirnos, además, que son largos, porque llevo casi cuatrocientas páginas de inicio. Especialmente pesadas están resultando las alrededor de cien de la separación de los protagonistas y, sobre todo, los andares por el deseirto de Paul y su madre. Algo me dice que el inicio fue especialmente difícil para el señor Herbert.

En fin, que es sólo una opinión, y esa opinión está claramente mediatizada por mi percepción algo trastocada de estos días.

Zirbêth.

sábado, abril 05, 2008

ATURDIDA

Estos días me siento aturdida. Mi parte animal y emocional está aturdida. La razón me dice, insistente y pragmática, qué hacer. Pero mis emociones chocan de plano con sus planes. Las viejas vibraciones incontrolables han reaparecido, intermitentes y espasmódicas. Ya que me estaba acostumbrando a no pensar demasiado, a vivir el día a día, tengo que volver a plantearme la resolución de futuro. Me resisto, como mi gatita cuando juega a pegarse con Gato, panzarriba, con las orejas hacia atrás y la cola bufa. Toda mi ambición es encontrar un lugar donde estar tranquila.

Mientras, observo fascinada las líneas, manchas, dibujos y formas de colores que envuelven de pelo una vida ajena pero propia. Sí, es fascinación lo que siento al verla. ¿Cómo puede haber tanta perfección en trescientos gramos de vida?

Zirbêth.

miércoles, abril 02, 2008

EN EL CLAVO



No me extrañaría que este fuese en parte mi problema. En este mundo, no se puede ser manifiestamente feliz...

Zirbêth.